de la brutalidad de sus padres, Eduardo
Lozano fue víctima y murió desangrado al cortar su padre las venas de sus
muñecas.
Elías
Lozano Coyotl mató a su hijo y luego se ahorcó.
Los juguetes de lalito, testigos mudos de la brutal manera en que fue asesinado por
su padre.
su padre.
En esta vivienda sucedió la tragedia que enluta a esa región
Una de los reclamos que dejó el filicida y suicida.
Los
reclamos a la esposa y madre que hoy sufre al verse en medio de la tragedia que
enluta su humilde hogar. Los
reclamos a la esposa y madre que hoy sufre al verse en medio de la tragedia que
enluta su humilde hogar.
ENRIQUE QUIROZ GARCÍA
HUEYAPAN DE OCAMPO, VER.
La sociedad aun no se repone de los repugnantes actos
cometidos por Sergio Bernardo Hernández López, oriundo de la comunidad Nacaxtle,
pueblo perteneciente a este municipio, que el pasado 08 de julio del 2011 diera
muerte a puñaladas a dos de sus hijos una niña y un varón de 5 y 12 años de
edad respectivamente. Estos hechos se registraron en un cuarto del hotel
Gardenias de Acayucan, donde las paredes y el piso quedaron ensangrentados para
siempre.
La mañana del pasado 20 de este mes, la señora Liliana Armas Hernández, al llegar a su hogar se
encontró con una escena dantesca: su pequeño hijo Eduardo Lozano Armas, de 3
años de edad, yacía inerte con las venas de sus muñecas desangradas. Muerto.
Frío. Para siempre. A unos metros del pequeño cuerpecito, su marido Elías
Lozano Coyotl, de 35 años de edad, colgaba de una reata que se encontraba atada
a una protección de fierro de una de las ventanas de la humilde vivienda.
En las paredes de la vivienda ubicada en la calle Josefa
Ortiz de Domínguez 85, en el Conjunto Habitacional, se pudo apreciar las
consignas del filicida y suicida: “Contentos no nos dejaron ser felices Atte
Elías y Eduardo”, “Por 3era vez nos corriste esta vez fue para siempre hasta
nunca mala madre mala esposa”, “A todas las amistades de lalo y mías rueguen
por nosotros”.
De acuerdo a datos recabados por este reportero, el filicida
y suicida conoció a su esposa en ciudad Juárez, donde trabajó por un tiempo
para luego volver a Hueyapan donde se dedicaba a vender palomitas y
chicharrones en un triciclo. Fuentes
extraoficiales aseguraron que Elías Lozano Coyotl no era efecto a las bebidas
embriagantes y que por otro lado tenía muchos problemas con su esposa por el
carácter de ésta.
Aseguran que Liliana
Armas Hernández regañaba de manera continua a su pequeño hijo, lo cual
originaba los pleitos entre esta pareja. Ayer 20 de febrero por la mañana, Elías
Lozano Coyotl, cortó las venas de su hijo con un cuchillo que después de su
incalificable acto colocó a un lado del pequeño cadáver de quien le llamara
papá, luego, escribió los por qué de su decisión y decidió culminar con su
vida.
Al lugar de los hechos acudieron policías municipales, el
agente del ministerio público de esta municipalidad licenciado Miguel Ángel
Hernández Molina, el perito criminalística, el médico Forense, quienes dieron
fe de los hechos.
Liliana Armas
Hernández se encontraba desconsolada por la tragedia que marcó su vida para
siempre.
Por otro lado, en Hueyapan de Ocampo, específicamente en la
comunidad de Nacaxtle se han suscitado varios suicidios de jovencitas. Es este
pueblo, según versiones de algunas personas, es un lugar donde el alcoholismo y
la pobreza han hecho escuela para quienes fuera de sí atentan contra su vida y la de sus
consanguíneos.
HUEYAPAN DE OCAMPO, VER.
La sociedad aun no se repone de los repugnantes actos
cometidos por Sergio Bernardo Hernández López, oriundo de la comunidad Nacaxtle,
pueblo perteneciente a este municipio, que el pasado 08 de julio del 2011 diera
muerte a puñaladas a dos de sus hijos una niña y un varón de 5 y 12 años de
edad respectivamente. Estos hechos se registraron en un cuarto del hotel
Gardenias de Acayucan, donde las paredes y el piso quedaron ensangrentados para
siempre.
La mañana del pasado 20 de este mes, la señora Liliana Armas Hernández, al llegar a su hogar se
encontró con una escena dantesca: su pequeño hijo Eduardo Lozano Armas, de 3
años de edad, yacía inerte con las venas de sus muñecas desangradas. Muerto.
Frío. Para siempre. A unos metros del pequeño cuerpecito, su marido Elías
Lozano Coyotl, de 35 años de edad, colgaba de una reata que se encontraba atada
a una protección de fierro de una de las ventanas de la humilde vivienda.
En las paredes de la vivienda ubicada en la calle Josefa
Ortiz de Domínguez 85, en el Conjunto Habitacional, se pudo apreciar las
consignas del filicida y suicida: “Contentos no nos dejaron ser felices Atte
Elías y Eduardo”, “Por 3era vez nos corriste esta vez fue para siempre hasta
nunca mala madre mala esposa”, “A todas las amistades de lalo y mías rueguen
por nosotros”.
De acuerdo a datos recabados por este reportero, el filicida
y suicida conoció a su esposa en ciudad Juárez, donde trabajó por un tiempo
para luego volver a Hueyapan donde se dedicaba a vender palomitas y
chicharrones en un triciclo. Fuentes
extraoficiales aseguraron que Elías Lozano Coyotl no era efecto a las bebidas
embriagantes y que por otro lado tenía muchos problemas con su esposa por el
carácter de ésta.
Aseguran que Liliana
Armas Hernández regañaba de manera continua a su pequeño hijo, lo cual
originaba los pleitos entre esta pareja. Ayer 20 de febrero por la mañana, Elías
Lozano Coyotl, cortó las venas de su hijo con un cuchillo que después de su
incalificable acto colocó a un lado del pequeño cadáver de quien le llamara
papá, luego, escribió los por qué de su decisión y decidió culminar con su
vida.
Al lugar de los hechos acudieron policías municipales, el
agente del ministerio público de esta municipalidad licenciado Miguel Ángel
Hernández Molina, el perito criminalística, el médico Forense, quienes dieron
fe de los hechos.
Liliana Armas
Hernández se encontraba desconsolada por la tragedia que marcó su vida para
siempre.
Por otro lado, en Hueyapan de Ocampo, específicamente en la
comunidad de Nacaxtle se han suscitado varios suicidios de jovencitas. Es este
pueblo, según versiones de algunas personas, es un lugar donde el alcoholismo y
la pobreza han hecho escuela para quienes fuera de sí atentan contra su vida y la de sus
consanguíneos.
la culpa es de la madre de nadie mas ahora ella llora lagimas de cocodrilo perra ahora si le importa el niño.-
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