Por Sergio M. Trejo González.
¡Cieeeerren las puertas! Se terminaron las campañas. ¿Quién va a ganar? Nadie lo sabe. Las apuestas y las encuestas en políticas son un verdadero riesgo. Mentira que los números estadísticos signifiquen u otorguen seguridad alguna. Las gráficas de porcentajes, sabemos, siempre resultan favorables para el partido político que las paga. Por eso “bajo del agua”, fuera de tiempos, seguramente, veremos las estrategias proselitistas, aun por parte de quien supuestamente lleva las preferencias (cosa que debemos reprobar y de reprochar). La moneda está en el aire. Olvídese usted de las cantidades monstruosas de asistentes a cualquier cierre de campaña. Y de la apoteótica, frenética y delirante concurrencia a cualquier festival artístico, pagado con dinero de nuestros impuestos. Todo es para apantallarnos y que caigamos en la baba de sentirnos obligados a votar por el partido que nos envuelve sutilmente en su exagerada publicidad. Si le regalaron diez cachuchas, veinte paraguas, quince morrales, o cinco costales de cemento y dos láminas, dele gracias a Dios y a los impuestos desviados en la campaña. Busque desde ahora su credencial para que el próximo domingo se presente temprano a sufragar, sin compromiso alguno, por quien usted prefiera. Olvídese si su nombre y número de credencial le fue anotado en alguna lista: El voto es secreto y libre. Nadie lo está viendo por vía satélite, ni es posible detectar por quien cruza usted la boleta electoral, si es que no anda de chismoso diciéndole a alguien. Si alguna persona se le acerca para proponerle cierta cantidad de dinero, quíteselo, aléjese y cuénteselo a quien más confianza le tenga, y si puede: ¡denúncielo a la FEPADE!
El voto es la clave para la verdadera transición democrática, con alternancia en el ejercicio del poder. Gracias a esa verdadera libertad ciudadana, de votar por los partidos que se prefieran, surgieron instituciones que acotan la participación del Estado y favorecen al pueblo… Razone usted su voto. Es mentira que el regreso del PRI signifique necesariamente más corrupción y vicios, como los que prevalecían en los 70 años en que solo los chicharrones del tricolor tronaban. También es mentira que la llegada del PRD a la Presidencia de la Republica resulta un caos para los mexicanos. ¿Más peligro del que vivimos? ¡No la frieguen! La verdad es que todos deseamos vivir en la tranquilidad, con seguridad y sin miedo. Las garantías resultan oferta similar de todos los candidatos: Se necesita voluntad política.
Por eso, es sano y aceptable que se oriente adecuadamente, sobre todo, a la gente mayor, acerca de la manera en que se debe cruzar la boleta, para que no haya equivocación del candidato de su preferencia. Fuera de esos detalles: Relájese, organice su domingo para que pueda cumplir su deber ciudadano, disfrutar del futbol o de unas buenas carnitas, asadas o como mejor las prefiera.
Tenemos algunos días para
esperar serenamente, sin la ruidosa propaganda que difundían los carritos
parlantes, con sus cancioncitas y su música cachonda que vamos a extrañar en
este compas de meditación… ¿otra vez Regina o nos vamos con la Xóchitl por el
PAN? ¿O con la del PRD? La crucial
decisión y el cálculo pueden girar en el último momento.
Se reconoce que hay personas
que viven agradecida con las hermanas Vázquez porque les remendaron los
agujeros de sus calles en estos tres meses de campaña o le obsequiaron algunas láminas
para su casa, y es aceptable su gratitud personal. En fin, si usted que cobra
en el ayuntamiento o le regalaron su despensa, piensa que por eso debe vivir votando
eternamente por ellas, pues no le quito su gusto, pero si por el contrario
observa que nuestro Palacio Municipal está como jaula de perico, que nuestras calles
están como palo de gallinero, y que nuestro parquecito Constitución, es un original lazo de cochino, y las esquinas
pobladas de basura son un trepadero de mapache… piénselo... Xóchitl Tress por
el PAN o Regina por el PRI... Ese es el problema.
70 años de PRI, 12 años
de PAN, a nivel nacional, y de estos: 9 años, continuos de las hermanas Vázquez
Saut en el Poder de Acayucan y la región, bien valen la pena para ponernos a
cavilar y buscarle al voto a un solo
partido o variando por diversos partidos en el llamado voto diferenciado, que
no es otra cosa que buscar al candidato de la preferencia sin importar que sean
desiguales las siglas partidistas. Ese creo que será el distintivo de esta
elección federal… además de la exorbitante cantidad de dinero que se derramó en
propaganda.
Nada está escrito
respecto a lo que ocurrirá el primero de julio... la historia está por venir y
el protagonista principal del próximo domingo es la ciudadanía. Cierto que nos
hemos equivocado, pero hasta los relojes descompuestos dan la hora correcta dos
veces al día. No vote usted al tin marín… cruce el nombre del partido y del
candidato con seguridad. Que no le tiemble el pulso para decidir sobre el
futuro de nuestro país y de nuestro distrito... Debemos votar pensando en la
democracia. Al hacerlo estaremos pensando en Veracruz y con amor a nuestro
México.
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