martes, 20 de septiembre de 2011

EL ESCARABAJO ROTO






EL ÉXODO POR LA PAZ: BUSCANDO LA SALIDA.



COLUMNA: POR ENRIQUE QUIROZ







Me desprendo del abrazo, salgo a la calle.


En el cielo, ya clareando, se dibuja, finita, la luna.


La luna tiene dos noches de edad.


Yo, una.



Eduardo Galeano



I




El horizonte ya no es azul.


Rojo es el horizonte y largos son los ríos de sangre que desandan la geografía de este país.


Las madres de Juárez siguen en busca de sus hijas muertas.


Socavan con sus manos el fondo de la tierra del cementerio que ahora es México.


La barbarie se instala.


45 mil muertos no bastan para esta guerra.


Víctimas colaterales de la necedad de los gobiernos son ahora números en las estadísticas del fuego cruzado.


Felipe Calderón es una mala caricatura tras el horror de los muertos.


Inocentes.


Ya no hay mañana para los muertos del Royale.


Ya no hay mañana para quien estuvo en el lugar y hora equivocada.


¿Quién, quienes ordenaron esto?


La muerte de los 38 niños de la guardería ABC en Hermosillo sigue impune.


Calderón guarda un minuto de silencio entre el reclamo de sus víctimas.


El México Nuevo del presidente de la República ya está aquí: Inseguro, Injusto, Empobrecido, Antidemocrático y Represor.


No hay mañana sino un presente lacerante en este barco sin timón que ahora es este país.




II




La Luna es un retrato.


Huitzilopochtli coquetea con su pico de colibrí en medio de las sombras.


Llega Javier Sicilia a esta ciudad.


Llegan las víctimas a este puerto sin boyas errantes.


Llegan quienes rompieron las cadenas y hoy piden justicia.


Llegan los padres, hermanos, huérfanos, esposos, esposas de quienes ya no volverán.


Llegan los familiares de los muertos…


¿Cuántas víctimas más les hacen falta a estos diosecillos infames que nos gobiernan?


¿Cuántos delitos más se apresurarán a inventar para atemorizar la conciencia de quienes hoy piden Libertad y Justica?


¿Cuánto horror, sangre, pobreza y dolor más les hacen falta?


La Luna es un retrato desdibujado por el rojo salpicado de este mar…



III



Los dueños de este país acuden al festín de las devaluaciones en Wall Street y ofertan en cocteles la miseria de los países del tercer mundo.


Las nuevas generaciones de pobres ya no sueñan.


Soñar es un privilegio que siguen matando quienes hoy nos gobiernan.


El PRI también nos dio por 70 años lecciones de muerte, represión, persecución y desaparecidos.


Los gobiernos siguen ensayando esta danza de sangre, zozobra y miedo.



IV



También los poetas son perseguidos por la barbarie.


Si lo sabrán Miguel, Efraín, Dalton, Federico y ahora Sicilia.


Tal es la recompensa del que pide Paz, Dignidad y Justicia.



V



Dos caravanas surcan la geografía de nuestro país.


La primera es encabezada por representantes del clero.


La segunda por el poeta Javier Sicilia.


La primera lleva las reliquias de Juan Pablo II, quien según los beatos es santo.


¿Los niños violados por sacerdotes pensarán lo mismo?


Quienes en medio de su miseria ven morir a los suyos de enfermedades curables, ¿pensarán lo mismo?


El recorrido de las reliquias de Juan Pablo II es una burla para los millones de pobres de este país.


Conocemos del poder económico del clero.


No tienen que hacer presunción de santidad con la riqueza que rodeó a quien nunca sufrió el hambre de quienes murieron y mueren en la extrema pobreza.


¿Qué dizque es milagroso?


¿Qué dizque son santos quienes bajo de la sotana impecable se rodean de la abundancia mientras los más pobres padecen hambre?


Hoy recorre la iglesia con el evangelio del fetiche bajo el brazo.


Quienes exculpan sus pecados dándose golpes de pecho seguramente correrán a santiguarse frente a las reliquias que atesora la iglesia.


La segunda caravana no lleva fetiches ni beatos.


Su reliquia es la palabra ahora perseguida…


¿Cuándo saldremos de la prehistoria que en esencia nos tiene atrapados?



VI



Para miles, millones de mexicanos el sexenio de Calderón es el más largo y sombrío de la historia de este país.


El futuro no se vislumbra en el horizonte.


Algunos dicen que ya no hay horizontes, sino borrascas de puertos derrotados…


Estaciones en la soledumbre de la ira.


Vías como lánguidos espejos donde los migrantes cruzan sus miradas en busca de la Luz.


Pero los espejos son un laberinto que los conduce a ninguna parte.


Entonces, la mirada se vuelve a los barrotes oxidados de esta sociedad.


Pero nadie los nombra.


Ahora son números.


Cifras.


Cálculos matemáticos de quienes tienen a su cargo el éxodo de los pobres de Centroamérica.


Esta la historia de los pobres de América.


Repetida en cámara lenta.


El telón siempre arriba.


Sin cortapisas.


Como el faro de esta Luna, que alumbra la herida.




























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